Hoy Vida en construcción cumple un año. 40 posts ( 41 con el de hoy) he escrito durante estos 365 días. No son muchos, pero han surgido cuando tenían que hacerlo. Ni antes ni después.
La vida en una cebolla fue el escrito que me inspiró a comenzar este blog. La necesidad que en algún momento de la vida lo pone a uno a pensar si ha aprovechado a cabalidad la gran oportunidad que Dios le dio de venir a experimentar el ser un habitante del planeta tierra.
Ha sido un año no muy fácil, pero también ha tenido sus cosas hermosas. Y así es la vida, ni más ni menos. Altas y bajas. Gozar los momentos lindos, llenarte de energía con ellos para asumir con entereza los ratos difíciles, y, lo más importante, aprender de ellos. De nada nos vale pasar por esta existencia sin ir aprendiendo a vivir cada día que pasa con todos sus minutos, los bonitos y los feítos.
Por lo pronto, yo seguiré disfrutando de la cebolla, que como les dije hace un año, me encanta. Algunas veces me la como salteadita con mantequilla y disfruto su dulzura. Otras, en plumitas, para que su fuerte sabor vaya impregnando poco a poco mis papilas gustativas. Y algunas veces, no me quedará más remedio que meterle un mordisco y aguantar la explosión. Algunas veces me hará llorar al picarla y otras no. Así seguirá siendo. Así seguiré viviendo. Así seguiré colocando nuevos ladrillos en mi vida en construcción.
El tiempo vuela y hay que aprovecharlo
Pd: Hoy se celebra la Natividad de la Virgen. En la zona donde vivo hay una semana de festividades dedicados a la Virgen del Valle. Buen augurio para mi blog. Digo yo.
...y adelante por los sueños y los años que aún te quedan!
ResponderEliminarFelicidades por ese primer cumpleaños! No había leído to exto inicial y me encantó (y me acordé de Shrek...).
ResponderEliminarPor muchas cebollas en distintas y deliciosas presentaciones y por muchos, muchos ladrillos maravillosos en esta vida en construcción!
Un beso.